
Cómo descongelar bien tu carne… y por qué congelarla a tiempo lo cambia todo
Sabemos que cuidar la calidad de la carne es tan importante como criar bien a nuestras vacas. Por eso hoy quiero contaros algo que parece simple, pero que marca una gran diferencia: cómo congelar y descongelar bien la carne que recibes. Y sí, ¡esto también es parte del amor con el que se cría y se cocina!
❄️ ¿Por qué es tan importante congelarla cuando la recibes?
Cuando recibís la carne de nuestras vacas, está fresca, recién cortada y en su mejor punto. Si no la vas a cocinar en los próximos dos días, lo mejor que podés hacer es congelarla de inmediato. ¿Por qué?
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Evitás que pierda frescura o se deteriore.
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Conservás su sabor, textura y jugosidad.
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Protegés todas sus propiedades nutritivas.
Tip: si sabés que vas a usarla en porciones, separala antes de congelar. Así descongelás solo lo que necesitás.
🧊 ¿Y cómo se descongela bien?
Aquí está la clave: la forma en que descongelás la carne puede hacer que se mantenga increíble… o que pierda todo su encanto. Te paso los métodos que sí funcionan:
✅ 1. En el frigorifico (el mejor método)
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Pasala del congelador al frigorifico con 24 horas de anticipación.
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Se descongela despacito, sin que pierda jugo.
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Es seguro, porque nunca entra en zonas de temperatura peligrosa.
📌 Ideal si ya sabés qué vas a cocinar mañana.
✅ 2. En agua fría (cuando vas con menos tiempo)
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Pon la carne (en bolsa bien cerrada) en un recipiente con agua fría.
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Cambiá el agua cada 30 minutos.
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En 1 a 2 horas puede estar lista.
⚠️ Nunca uses agua caliente, porque puede empezar a cocinarse por fuera y echarse a perder por dentro.
❌ Lo que no recomendamos:
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Descongelar al sol o a temperatura ambiente: puede parecer rápido, pero permite que las bacterias se multipliquen.
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Usar el microondas: porque puede cocinar partes de la carne y secarla.
❤️ Un buen congelado y descongelado = una carne como recién cortada
Si la congelás cuando todavía está fresca y la descongelás con cariño, la carne conservará todo: su sabor, su textura y ese aroma que nos recuerda el campo.
Así, cada vez que cocines un corte de nuestras vacas, vas a sentir que estás comiendo carne de verdad.